El emprendedor no es sólo esa persona joven que acaba de iniciar un proyecto o negocio, sino que lo es toda la vida, independientemente de la edad que tenga.
Cuando una persona es emprendedora, siempre tiene en la cabeza la idea de mejorar su proyecto o negocio, además de la creación de nuevos proyectos.
Cuando un proyecto se consolida, el emprendedor necesariamente tiene que pensar en la creación de un nuevo proyecto, para no entrar en la monotonía y con esto en el desánimo.
Si quieres estar «despierto» en los negocios, necesariamente tienes que tener «sueños», pero siempre con los ojos bien abiertos.